Por fin, luchando contra la pereza y las viciadas interminables a algún juego de ordenador, he conseguido pintar el último de los asesinos de mi Fuerza Ejecutora, este asesino del Clado Eversor. Como ha sido la tónica con el resto de asesinos, el pintado ha sido de lo más sencillo, buscando mantener el esquema de negro y rojo que había seguido en el resto de asesinos.
Como curiosidad comentar que esta miniatura la adquirí a través de ebay y venía pintada (incluso todavía peor de lo que yo la he pintado), de modo que tuve que despintarla. Para ello usé líquido de frenos, y tengo que decir que es fantástico para esta labor. Después de haber tenido experiencias engorrosas y corrosivas empleando aguarrás y otros disolvente, sin duda el líquido de frenos es lo mejor para quitar pintura de las miniaturas. Incluso respeta el plástico y la resina sin deteriorarlos en absoluto.
Para la peana elegí el esquema que vengo usando con los Manos de Hierro, ya que quería que la peana de cada asesino fuese diferente, para representar así los múltiples entornos en los que cumplen sus misiones y de paso dar algo de variedad al grupo.
Como decía con el Eversor tengo lista a mi Fuerza Ejecutora, un viejo sueño de juventud cumplido, ya que estas miniaturas me han encantado desde siempre y por fin las tengo pintadas en mi colección.
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